¿ Macro ciudades o ciudades jardín ?

Galicia debe lograr convertirse en una ciudad jardín, una ciudad abierta y polinuclear, con un entorno natural cuidado, pero en el cual las nuevas tecnologías acorten las distancias y ayuden al desarrollo económico, pudiendo beneficiarse de los avances y no por ser una región periférica seguir a sufrir obstáculos. Las diferencias entre regiones desarrolladas, periféricas atrasadas, etc., con las nuevas tecnologías se diluyen.

Buscando asentamientos de población más equilibrados, humanos, sostenibles, deslocalizando las actividades productivas, se “habita el espacio”, pero no olvidemos que debe buscarse de forma racional, de forma que los recursos naturales no se vean presionados. Desde lo público la prestación de servicios a estas áreas abre un debate sobre si éste debe ser el camino a seguir por su mayor gasto presupuestario.  Parece más lógico esta visión de futuro que la de concentrar la población en unas pocas macro ciudades que romperían nuestra visión tradicional, cultural, nuestra forma de vivir en la naturaleza y en  contacto con ella, que a la larga sus repercusiones sobre la salud, contaminación del entorno, etc., supondrá un incremento de la factura.

Se debe luchar contra la falta de políticas de desarrollo rural que en las últimas décadas no se han preocupado en equilibrar lo rural y lo urbano, las desigualdades entre el corredor atlántico y el interior, entre desarrollo territorial y urbanístico, entre un urbano rico y un rural pobre.

La marginación social que surge en las ciudades puede ser un aliciente para asentar a los jóvenes en el rural, ya no se ve tan claramente a las ciudades como lugares de progreso y de oportunidades. Una dinamización económica del rural es necesaria para acabar de conseguirlo. Fomentar agroindustrias y centros de investigación no en las ciudades, sino donde se origina el producto contribuirán a que el conocimiento científico se funda con el conocimiento práctico y tradicional, esa unión será provechosa para avanzar en el conocimiento y la recuperación de especies autóctonas, el respeto al medio, el conocimiento y disfrute de la naturaleza, logrando un desarrollo sostenible e inteligente.